¿Quién imaginó que Tennessee llegara a la Ronda Divisional? La verdad es que nadie y menos con un partido Titans vs Ravens en los playoffs de la NFL, pero lograron sorprender a todos con un equipo que no solo tiene para competir ahorita, sino que podría ser un fuerte rival en los próximos años.
Eliminaron a los actuales campeones de la liga.
Es cierto, Tom Brady y compañía ya no se veían igual de dominantes que siempre, pero a ese equipo nunca se le puede dar por muerto. Titans sabía eso y no sucumbió ante la presión, logrando vencer a un equipo que siempre es contendiente y ahora teniendo enfrente al favorito a ser campeón este año, los Ravens.
Tener tanto éxito no fue algo que sucedió de la noche a la mañana, de hecho tomó mucho tiempo, pero por fin lo encontraron, la fórmula secreta que los convirtió en un ‘caballo negro’, ese equipo en el que nadie creía, pero que ahora los hace más peligrosos que nunca.
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Encontraron la forma de tener una estrella en cada posición importante.
Hay que empezar por el que mueve la ofensiva, Ryan Tannehill. Ese QB que estaba confinado a los Dolphins sin poder brillar un solo segundo, pero encontró una segunda oportunidad en Tennesse, donde por fin demostró de lo que está hecho y nadie lo esperaba que fuera tan bueno.
A pesar de que en el Juego de Comodines solo logró 72 yardas, terminó la temporada regular con 2,742 totales, 22 pases de anotación, solo 6 intercepciones y un impresionante rating de pasador de 117.8 (cabe recalcar que Tom Brady acabó con una calificación de 88).
Aunque su arma secreta está en su corredor, Derrick Henry.
Contra Nueva Inglaterra, corrió para 182 yardas en 34 acarreos: más acarreos de los que ningún jugador había registrado en un juego esta temporada, más yardas por tierra de las que cualquier jugador había acumulado en un juego de playoffs desde 2008 y más yardas por tierra de las que los Pats habían permitido para un solo jugador. Todo en un solo juego.
Hicieron historia ese partido, consiguieron 72 yardas por aire, ningún equipo había ganado un juego con tan pocas yardas aéreas esta temporada y ningún equipo había ganado un juego de playoff con tan pocas yardas aéreas desde 2010. Todo gracias al poder de Derrick Henry.
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Aunque no siempre fue así de efectivo.
Las primeras cuatro temporadas de Henry en la NFL, fueron consideradas un fiasco. En 2016 y 2017, fue el backup de DeMarco Murray, en 2018, se convirtió en titular, pero aún así dividió los acarreos con el menos productivo Dion Lewis. Henry incluso comenzó débilmente en 2019, durante los primeros 56 juegos de su carrera, solo corrió para 100 yardas cinco veces.
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Esta temporada fue en la semana 10 cuando explotó y hasta acabó como líder en yardas terrestres. Desde esa fecha, Henry ha alcanzado la marca de 100 yardas en seis de los siete juegos que ha jugado, 4 de ellas fueron consecutivas y eso antes de acumular 211 yardas y tres touchdowns en una victoria de la Semana 17 contra los Texans.
Derrick Henry sin duda ya debe ser considerado en los top RBs de la liga 🔥🔥#Titans #NFL100
pic.twitter.com/xizjZxkiJ3— FantasyFootballMEX (@FantasyMex) January 8, 2020
¿Qué lo hace tan especial?
Con 1.91 de estatura y 108 kg de peso, Henry es el RB más grande de la NFL, en términos de altura y peso. Eso lo hace tan peligroso, no solo es rápido, sino que carga defensivos como si no hubiera mañana. Es el único jugador en la base de datos de NextGenStats que se enfrenta a ocho hombres en más del 50% de sus acarreos y todavía promedia al menos 4.0 yardas por acarreo y lo hizo dos veces, en 2016 y 2017.
Puede que eso no parezca mucho en una era en la que los pases eficientes han reemplazado el poder de correr, pero Henry usa su fuerza física pura con un efecto devastador. Es por eso que el partido de Titans vs Ravens de los playoffs en la NFL será tan especial, una de las mejores defensivas en la carrera contra el mejor RB de la liga.