Este año ha sido uno lleno de cambios en el mundo del deporte y aunque casi todos han sido por situaciones complicadas, también hay modificaciones que vale la pena reconocer. Uno de ellos sucedió en el futbol americano colegial, ya que Sarah Fuller se convirtió en la primer mujer en jugar un partido de NCAA.
Fue la pateadora de Vanderbilt.
Se presentaron varios contagios en el equipo universitario y todos los jugadores en esa posición tuvieron que aislarse. Recurrieron a una solución inusual, la cual incluye al equipo de futbol de la universidad, donde la portera los sacó del problema.
Eso se convirtió en el hecho de que una mujer ha disputado por primera vez en la historia un encuentro dentro de las cinco mejores conferencias de la NCAA. No se sabía si podría estar dentro, pero el simple hecho de equiparse ya hizo que pusiera su nombre en los libros de historia.
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Estuvo dentro un par de jugadas.
Pateó el balón algunas yardas y aunque no fue espectacular, el simple hecho de que pisara el emparrillado, ya la convertí en alguien extraordinaria. Marcó un antes y un después para las mujeres que son amantes de este deporte, el cual siempre se pensó era solo para hombres.
«Solo quiero decirles a todas las chicas que puedes hacer cualquier cosa que te propongas, realmente puedes. Y si tienes esa mentalidad hasta el final, puedes hacer grandes cosas», mencionó la atleta tras terminar el partido, mismo que perdieron 41-0 contra Missouri.
Making history. #PlayLikeAGirl | #AnchorDown pic.twitter.com/57ffStmje9
— Vanderbilt Football (@VandyFootball) November 28, 2020
Es la primera en participara en el Power 5 de la NCAA.
Katie Hnida de New Mexico en 2003, Liz Heaston de Willamette University en 1997 y Ashley Martin de Jacksonville State University en 2001 ya habían participado, pero Sarah Fuller fue la primer mujer en estar en una de las 5 grandes conferencias de la NCAA.