La decepción más grande de toda la NFL tiene un nombre y se llama Cleveland Browns, quienes pasaron de ser un fuerte contendiente a estar entre los peores equipos, pero ahorita ese podría no ser el mayor de sus problemas, porque Odell Beckham Jr. no está contento con la situación.
En los New York Giants era la estrella.
Estuvo 5 años en la ‘Gran Manzana’ y en todos ellos brilló, era catalogado como uno de los mejores receptores de la liga, además de que consiguió un total de 310 recepciones para 5,000 yardas y 38 touchdowns.
Cuando llegó a Cleveland esta temporada, las cosas han sido muy diferentes, tiene solo 575 yardas a mitad de la campaña y solo 1 TD. Lo que se pensaba que sería la mejor adquisición para una franquicia que está por los suelos, terminó siendo su perdición.
"I can’t get the ball to save my life” – Odell Beckham@obj had Chris Harris beat for a touchdown but Baker didn't even look for him, he threw to double coverage instead on 4th down at the end of the game.pic.twitter.com/Jpj86cWgN4
— Dov Kleiman (@NFL_DovKleiman) November 4, 2019
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No todo ha sido culpa del receptor.
Baker Mayfield, quien se esperaba fuera el QB perfecto para Beckham, no ha funcionado. Lleva solo 7 pases de TD y 12 intercepciones para tener el peor porcentaje de pases completos de toda la liga con 58.7%. Ningún receptor puede brillar con un mariscal de campo así.
Integrar a Beckham Jr. en la ofensiva ha sido más difícil de lo esperado, ya que el mariscal de campo de los Browns ha descubierto que las ventanas son pequeñas debido a la doble cobertura dada a uno de sus dos receptores de Pro Bowl.
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Por eso, Jarvis Landry es su favorito.
Lleva 36 recepciones, 15 yardas en promedio por recepción y un TD también. Aunque todo eso se debe a que todos están preocupados por cubrir a Beckham y Landry ha estado mucho más tiempo más libre para recibir pases, que aún así no han sido muchos.
Además, Beckham ya mostró su enojo.
Es bueno recordar que una de las razones por las que salió de los Giants fue por problemas con Eli Manning y como Mayfield no le lanza, también podría enojarse con él. «Puedo lidiar con eso, puedo soportar todo, así que pónganme la presión a mí y verán qué pasa. Me importa este juego, punto, así que si me pongo emocional durante un partido, es porque me importa, soy un niño grande», comentó.
Eso quiere decir que necesita estar más involucrado para estar contento, porque al final lo único que quiere es jugar y ayudarlos a ganar. Si Mayfield no cambia su forma y lo une más al juego, los problemas entre los Browns y Odell Beckham Jr. solo irán creciendo con el paso del tiempo.