Es muy difícil que un futbolista profesional logre consolidarse en su carrera deportiva, no sólo basta con trabajar y esforzarse, sino que es necesario tener un talento innato para conseguirlo, sin embargo, hay un caso sorprendente de alguien que pasó desapercibido en las canchas, pero es un fenómeno en el banquillo: Jürgen Klopp, de jugador de quinta a mente maestra.
Nació en Glatten, un municipio de Stuttgart, Alemania de 1,500 habitantes el 16 de junio de 1967.
Su sueño era convertirse en médico, sin embargo, sus pésimas calificaciones lo obligaron a decidirse por el futbol, que también era su pasión, aunque no contaba con tanta calidad para sobresalir en las canchas.
Su carrera como jugador fue extremadamente corta, ya que jugó 341 partidos totales en 3 años (1989-2001), es decir, inició con 22 años de edad y terminó con 25, periodo que le bastó para convertirse en el tercer máximo anotador del Mainz de su país.
Te puede interesar: Jürgen Klopp minimizó al Camp Nou previo a las Semifinales de Champions
En 2001, su padre falleció a causa del cáncer, lo cual forjó su carácter para convertirse en director técnico una vez que colgó los tacos, para tomar el mando del equipo en el que anotó 56 goles.
Incluso, él mismo ha admitido varias veces que no fue un buen jugador: “Como jugador tenía la habilidad de uno de Quinta División y el cerebro de uno de Primera División y al final, el resultado fue un jugador de Segunda División”.
Desde el primer momento demostró que era una mente brillante para la creación de estrategias, puesto que sólo le bastó un año para ascender al Mainz por primera vez a la Bundesliga.
Una vez en la máxima categoría del balompié alemán, consiguió clasificarlo a la Europa League, pero fue eliminado en la primera fase al ser derrotado por el Sevilla, que fue campeón de ese torneo.
Te puede interesar: El Barcelona le respondió a Jürgen Klopp con un picante mensaje
Después de 7 años, fue contratado por el Borussia Dortmund y, nuevamente entregó increíbles resultados al ganar 2 títulos de liga, uno de Copa, 2 de Supercopa y lo llevó hasta la Final de la UEFA Champions League en el 2013, misma que perdió ante el Bayern Münich por 2-1.
En 2015 salió de su país natal para emigrar a Inglaterra y tomar las riendas del Liverpool, donde, para no perder la costumbre, rindió frutos de inmediato al llevarlo hasta la Final de la Europa League, que perdió 3-1 contra el Sevilla.
Desde entonces, suele mantener al club en los primeros puestos de la Premier League y actualmente es el segundo lugar con 91 puntos, uno por debajo del Manchester City, que es líder a falta de 2 jornadas, por lo que está muy cerca de poder ganar su primer título en Inglaterra.
Te puede interesar: Salah pidió salir del Liverpool por una acalorada pelea con Klopp
Por si fuera poco, metió a los ‘Reds’ a la Final de la más reciente edición de la Champions League, donde fue derrotado por el Real Madrid por 3-1 y está en busca de la revancha, ya que jugará la Semifinal de la campaña actual ante el Barcelona.
Así es como Jürgen Klopp ha dejado su legado en el mundo del futbol, aunque reconoce que no estará ahí por siempre: «Probablemente termine mi carrera antes que el resto de entrenadores, esto es muy intenso y no quiero morir en el banquillo. Después del Liverpool me tomaré un año sabático, ése es el trato que tengo con mi familia».
Por lo pronto, deberá continuar enfocado en lograr los objetivos que tiene en puerta: el título de la Premier League y el de la Champions League, que tanto se le ha negado.