Luego de empezar la temporada 3-0, los Cowboys la han pasado demasiado mal, ya que aunque son líderes de su división, aún no aseguran un lugar en los playoffs y muchos creen que la culpa es de su entrenador Jason Garrett.
Parece que su trabajo está en la cuerda floja.
Malas decisiones en momentos decisivos y perder juegos en los últimos minutos han hecho que los aficionados de Dallas entren en desesperación con su Head Coach, ya que lleva años al mando y no ha podido darles un campeonato.
Por momentos, el dueño Jerry Jones también ha mostrado su enojo hacía él, pero siempre termina por respaldarlo diciendo que es el trabajo perfecto para él y que no tiene planes de terminar con su relación laboral, al menos en lo que resta de esta campaña.
La ironía de ver a Jerry Jones llorar porque va a mantener a Jason Garrett.
Y los aficionados de Cowboys llorando porque no van a correr a Jason Garrett. pic.twitter.com/oS0E8Ovdt3
— mauricio pedroza (@mauriciopedroza) November 29, 2019
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Hasta aseguró que seguirá en la NFL en 2020.
Aunque no es momento de entrar en pánico, aficionados de los Vaqueros, porque lo bueno es que Jones nunca dijo que sería en el Dallas. En 2019 seguirá al mando, pero podría ser que en caso de no darles un Super Bowl -todos saben que no pasará-, su tiempo en la franquicia acabe.
En una entrevista, Jerry Jones dijo: «entrenará en la NFL el próximo año«, pero no dijo si sucederá en Dallas. Además, añadió que analizó una lista de candidatos para convertirse en el próximo entrenador en jefe de los Cowboys en 2020, pero concluyó que «no pueden garantizarme a mí ni a mis fanáticos un Super Bowl».
Por el momento, no hay nada seguro en esa posición.
El multimillonario de 77 años no descartó a Jason Garrett como entrenador de los Cowboys para la próxima temporada, pero al mismo tiempo tampoco aseguró que firmará una extensión de contrato. Parece que de lo único que está seguro es que si sale de los Vaqueros, alguien más lo tomará.