Desde niño ha estado enamorado de las duelas y el básquetbol, siempre tenía una pelota en la mano y dejar de botarla era casi imposible. Su sueño era convertirse en profesional y lo logró, aunque muchos dijeron que nunca podría, por eso que la verdadera pregunta es, ¿cómo llegó Juan Toscano a la NBA?
Todo empezó en la NBA G-League.
Después de una temporada y media con los Santa Cruz Warriors, Juan Toscano Anderson dejó ver que tenía mucho talento como para algún día jugar con las grandes estrellas. Durante la campaña 2019/20, en febrero para ser más claro, firmó por el resto de la temporada con los Golden State Warriors.
Parecía que el destino estaba escrito para que terminara en ese equipo de la NBA. Toscano creció en un barrio al este de Oakland, California, a 10 minutos del Oracle Arena (casa de los Warriors hasta la temporada pasada), y toda su vida soñó con jugar en esa histórica franquicia.
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Juan nació en EUA, pero su madre es de Michoacán.
Es ahí de donde saca su herencia mexicana, pero la realidad es que toda su vida ha estado en el país de las ‘barras y las estrellas’. A pesar de eso, su familia seguía arraigada al deporte más popular en México, el futbol, de hecho nadie amaba el baloncesto y Juan tuvo que ideárselas solo.
A los 9 años fue cuando conoció otro deporte que no fuera el futbol y los 15 se dio cuenta que se quería dedicar profesionalmente, fue así como recibió una beca para jugar en la Universidad de Marquette. Para su suerte, esa escuela es conocido por formar buenos jugadores como Dwyane Wade y Jimmy Butler.
Después tuvo que continuar en México.
Tras cuatro años en la NCAA, fue invitado por Sergio Valdeolmillos y Ramón Díaz a la selección mexicana para representar a México en el Preolímpico del 2015. Después, Soles de Mexicali lo fichó para en la Liga Nacional de Baloncesto Profesional para empezar su carrera como profesional.
Un año después firmó con Fuerza Regia de Monterrey, donde quedó campeón en la temporada 2016-2017 y fue MVP del Juego de Estrellas dos años consecutivos, además de ganar el concurso de clavadas. Había renovado contrato con el equipo, pero a pesar de eso quiso seguir su sueño.
En el 2018, se probó con los Santa Cruz Warriors, filial de Golden State en la G-League.Estuvo en el training camp y a 15 minutos de que iniciara el Media Day le informaron que tenía un lugar en el roster final y los regios lo dejaron ir.
En su primera temporada promedió 7 puntos, 6.8 rebotes, 2.1 asistencias y 1.3 robos en 44 juegos, por lo cual fue invitado a la Summer League y a la pretemporada, aunque no fue suficiente y tuvo que jugar su segundo año con los de Santa Cruz en el que en 31 juegos promedió 12.5 puntos, 9.2 rebotes, 2.6 asistencias y 1.3 robos.
Sus números ahora si fueron suficientes para que el jueves 6 de febrero los Warriors lo firmarán por lo que resta de la campaña 2019-2020. Apenas está empezando su carrera, pero así fue cómo llegó Juan Toscano a la NBA, luchando día a día y demostrando que el talento puede contra todo.