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Suena como una completa utopía, pero la unión de Concacaf y Conmebol podría ser la mejor solución para el futbol del continente americano en todos los aspectos: deportivo, económico y social si tomamos como ejemplo la Copa América Centenario, donde participaron Selecciones de ambas confederaciones.

En este momento se están desarrollando la Copa Oro y la Copa América.

El torneo de la Concacaf ha sido criticado a lo largo de los años por el bajo nivel de los participantes, mientras que la competencia de la Conmebol se ha vuelto muy repetitiva y poco espectacular, por lo que una fusión podría resultar mejor de lo esperado.

El aniversario número 100 del certamen sudamericano fue el pretexto para que participaran 10 representativos de la Conmebol y 6 de la Concacaf, teniendo a Estados Unidos como sede, un país que sabe perfectamente cómo llevar a cabo la organización de un evento de esta magnitud en cuanto a logística y mercadotecnia.

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Para dicha edición se registraron más de 1.5 millones de asistentes a los estadios, cantidad que rompió el récord histórico, además de que el promedio por partido fue de 46,373 espectadores, cifra que también superó la mejor marca registrada de 40,000 en Venezuela 2007.

Por si fuera poco, fue el segundo evento futbolístico con sede en Estados Unidos con más asistentes, sólo por debajo del Mundial de 1994, tomando en cuenta que en la Copa América se disputaron 32 partidos, es decir, 20 menos que en la máxima competencia de la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA).

El espectáculo en las canchas fue la razón principal del éxito del certamen, puesto que se anotaron 91 goles en total (sin contar las 2 tandas de penales que hubo), lo que significa que el promedio fue de 3 por encuentro.

También se rompieron varios récords de ratings televisivos.

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La Copa Oro lleva la delantera en el aspecto comercial.

En este momento es preocupante que los estadios de Brasil se ven prácticamente vacíos para la actual Copa América, caso totalmente opuesto a la Copa Oro, puesto que los compromisos de la Selección Mexicana ante Cuba y Martinica asistieron más personas que a cualquiera de los juegos que se han disputado hasta ahora en el torneo sudamericano.

Hasta el momento se ha registrado más de un millón de asistentes a la Copa Oro, por 502,923 de la Copa América, es decir, prácticamente el doble, además de que el promedio de la Concacaf es de 48,363, a diferencia de los 27,940 del certamen de Conmebol.

Ahora bien, el éxito de la Copa Oro no es casualidad, puesto que su razón de ser es la estrategia de promoción, misma que consistió en un abono para que todos los aficionados pudieran asistir a al menos 2 de los 3 cotejos de fase de grupos.

En contraste, los precios de los boletos de la Copa América fueron de entre 30 y 590 reales brasileños (7.81 a 153.59 dólares) durante la fase de grupos, sin contar otros gastos como vuelos y hospedaje para los extranjeros, pero el motivo principal por la baja asistencia es la falta de publicidad en las diferentes sedes de Brasil.

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Otro factor que ha influido en la escasez de asistentes a los estadios es el largo y tedioso proceso para obtener entradas, ya que consiste en realizar un registro fotográfico y la espera para recoger los boletos puede llegar a ser hasta de 2 horas, comprobando que la logística y la organización no han sido eficientes.

Estos son los partidos donde se han registrado más aficionados en ambos torneos:

Copa Oro:

México vs Cuba + Canadá vs Martinica: 65,527.

Martinica vs México + Canadá vs Cuba: 59.874.

México vs Canadá + Cuba vs Martinica: 52.874.

Nicaragua vs Haití + Costa Rica vs Bermudas: 31,436.

Guyana vs Panamá + Estados Unidos vs Trinidad y Tobago: 23,921.

Tomando en cuenta que es un boleto para 2 partidos el mismo día en el mismo estadio.

Copa América:

Chile vs Uruguay: 57,442.

Brasil vs Bolivia: 47,260.

Brasil vs Venezuela: 42,587.

Perú vs Brasil: 42,317.

Catar vs Argentina: 41,390.

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La Copa América tiene mejor nivel de juego.

La fortaleza de la competencia sudamericana son las potencias mundiales que participan, tales como Brasil, Argentina, Uruguay, Colombia o Chile, mientras que del otro lado, la Copa Oro suele ser dominada por México y Estados Unidos.

Uno de los ejemplos perfectos del pobre nivel futbolístico del torneo de la Concacaf es Martinica, que únicamente contó con 6 jugadores profesionales y se vio en la necesidad de recaudar fondos para poder viajar a Estados Unidos y competir, algo que no les sucede frecuentemente.

La prueba de la gran diferencia de nivel entre ambas confederaciones son los resultados que se han dado hasta ahora en los 2 torneos, mientras que en la Copa Oro se han registrado 8 goleadas, en la Copa América sólo ha habido 4, que no han sido tan escandalosas como las del torneo de la Concacaf.

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Estas son las goleadas de ambas competencias:

Copa Oro:

Canadá 4-0 Martinica.

México 7-0 Cuba.

Costa Rica 4-0 Nicaragua.

Estados Unidos 4-0 Guyana.

Cuba 0-3 Martinica.

Estados Unidos 6-0 Trinidad y Tobago.

Canadá 7-0 Cuba.

Honduras 4-0 El Salvador.

Aún faltan 2 partidos para que termine la fase de grupos.

Copa América: 

Brasil 3-0 Bolivia.

Uruguay 4-0 Ecuador.

Chile 4-0 Japón (tomando en cuenta que fueron invitados para esta edición).

Brasil 5-0 Perú.

Otra diferencia entre ambas competencias es el premio para el ganador, ya que el campeón de Copa Oro se llevará 1.25 millones de dólares, el quinto más bajo de las 6 confederaciones existentes, mientras que el monarca de la Copa América se embolsará 13.5 millones de dólares.

Una fusión entre Concacaf y Conmebol sería lo mejor que le podría pasar a todo el continente, ya que Norteamérica se enfrentaría a Selecciones de mayor nivel para mejorar el suyo y Sudamérica se vería beneficiada comercialmente.