El fútbol mexicano vivió días de auténtica revolución con movimientos inesperados en los banquillos. Pumas sorprendió al anunciar a Efraín Juárez como su nuevo entrenador, confiándole la difícil tarea de cambiar el rumbo del equipo. Juárez, con experiencia en cuerpos técnicos europeos, tendrá que demostrar que está listo para dirigir en un momento complicado. La directiva auriazul ha depositado su confianza en él con la esperanza de que pueda recuperar el nivel competitivo del equipo.

Por su parte, Chivas se quedó sin entrenador antes de enfrentar a los universitarios, generando incertidumbre en el equipo y su afición. La falta de estabilidad en el banquillo ha sido un problema recurrente para el Rebaño, y ahora tendrán que buscar a un estratega que logre consolidar un proyecto a largo plazo. En otro giro inesperado, Veljko Paunovic dejó de ser el técnico de Tigres y Guido Pizarro, un histórico del club, asumirá la dirección técnica tras anunciar su retiro como jugador. Esta decisión ha sorprendido a muchos, ya que Pizarro pasa directamente del campo al banquillo en una apuesta arriesgada por parte de la directiva felina.

Estos movimientos sacuden el panorama del torneo y generan nuevas expectativas sobre el desempeño de estos equipos en lo que resta de la campaña. Mientras algunos buscan estabilidad, otros apuestan por nuevas estrategias para recuperar el rumbo.