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Muchos piensas que la liga estadounidense de futbol está en una constante lucha con la Liga MX por definir cuál de las dos es mejor, pero la realidad es otra. Resulta que su batalla es con uno de los suyos, porque la MLS censura a sus aficionados sacándolos del estadio cada vez que intentan protestar.

Varios han sido expulsados por llevar pancartas con ciertas frases.

Al parecer la MLS tiene un Código de conducta de los fanáticos de la liga y algunos de ellos están infringiendo esa regla. Se trata de hacer un ambiente pacífico en el cual no se tenga que hablar sobre temas de política, racismo o cualquier lenguaje inapropiado. 

El Código dice lo siguiente: «Se prohibe usar (incluyendo cualquier signo u otra representación visible) lenguaje y / o gestos políticos, amenazantes, abusivos, insultantes, ofensivos, que incluyen lenguaje o comportamiento racista, homofóbico, xenófobo, sexista o inapropiado».

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Algunos grupos antifascistas se han querido meter a los partidos.

En el partido del 11 de agosto del Atlanta United contra NYCFC, nueve miembros del grupo de partidarios de Resurgence fueron expulsados ​​del estadio debido a sus signos de violencia armada y antifascismo.

Además, la MLS hará lo que sea por seguir evitando problemas en las gradas. Algunos de los fanáticos también recibieron prohibiciones de dos años del estadio y otro segmento de los partidarios expulsados ​​recibió una prohibición de hasta tres partidos.

Aunque la liga les da una oportunidad de poder regresar.

Pueden volver a tener el derecho de comprar boletos e ingresar, si pagan una multa 250 dólares por una «clase de fanáticos» de cuatro horas y escriben una carta de disculpa. Básicamente la MLS quiere enseñarle a sus aficionados cómo comportarse. 

Muchos aficionados se sienten decepcionados con tal acción de la liga.

«Nuestro momento nacional actual nos da el derecho a protestar y eso no afirma que la oposición a la violencia armada, el fascismo y el racismo se consideren «políticos», comentó un aficionado. Eso quiere decir que solo quieren dar a conocer su punto de vista a través de un medio que ven millones de personas, sin afán de molestar a nadie. 

Lo bueno es que no están solos en esta pelea. Los Portland Timbers comunicaron que están de su lado, «Nos mantenemos firmes contra el fascismo. Siempre lo hemos hecho y siempre lo haremos. Nuestras acciones que apoyan la inclusión, la diversidad y la aceptación durante más de una década hablan por sí mismas, al igual que la libertad que siempre les hemos dado a nuestros seguidores para expresarse en nuestros partidos».

La MLS censura a sus aficionados, pero tendrá que decidir si continuará con esa postura, la cual no rige a este deporte, al menos en Europa o continuar luchando por la misma vibra «política» del resto de los deportes estadounidenses, donde ninguna virtud es tan importante como la forma de pensar de los propietarios.