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Todo era felicidad ayer en Chihuahua, ya que Juárez logró vencer a Pumas en las semifinales de Copa MX y tendrá la oportunidad de coronarse campeón si consigue ganarle al América en el último partido. Lo malo es que el gusto les duró muy poco, ya que el Estadio de Juárez podría ser vetado. 

Una pelea al final del encuentro fue la que ocasionó esta situación.

Sufrir una derrota no es algo que quieras vivir, pero cuando llega a pasar, lo último que quieres es que alguien se esté burlando, ya que puedes reaccionar de una forma muy poco cordial. 

Justo eso paso cuando Marioni denunció que camino a la conferencia de prensa tuvo que pasar en medio de la tribuna y se hizo de palabras con un aficionado, lo cual terminó en una pelea entre ambos.

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Para muchos la culpa es del técnico de Pumas, pero el reglamento dice otra cosa.

En específico el Artículo 49, Capítulo V, ‘Infracciones que son responsabilidad de los clubes’, justo en el inciso F dice que los clubes locales deben garantizar la seguridad de todos los asistentes para evitar incidentes en “tribuna, pasillos, túneles y vestidores”, en este caso el inmueble no tenía la seguridad adecuada.

La Comisión Disciplinaria será la encargada de llevar a cabo una investigación para definir cual será el castigo para ambas partes.

Juárez podría ser sancionado con un multa de 200 hasta 6,000 salarios mínimo o sufrir el veto del estadio. 

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Por el otro lado, Marioni tampoco saldrá libre de esto, en caso de que no solo se haya defendido de una agresión, sería acreedor a una multa e incluso una suspensión de hasta 6 partidos.

La final debería jugarse en el Estadio Olímpico Benito Juárez porque el equipo pasó en mejor lugar, pero en caso de que si sufran de una sanción, el partido se pasará al Estadio Azteca.