Como ya es costumbre, el Black Monday de la National Football League (NFL) cobró a sus primeras víctimas una vez que se consumó el final de la temporada regular 2021: estos fueron los despidos.
Hasta ahora, tres entrenadores en jefe han dejado su cargo.
El hecho de no clasificar a playoffs suele salir muy caro al ser el motivo principal que toman en cuenta las directivas para prescindir de los servicios de los máximos responsables de los equipos en el aspecto deportivo.
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La salida más anunciada era la de Matt Nagy de Chicago Bears, quien dejó mucho que desear terminando con seis triunfos y 11 derrotas que lo ubicaron como el vigésimo sexto de toda la liga.
Duró cuatro años en el cargo y llegó a la ronda de comodines en un par de ocasiones.
Casualmente, en la misma División Norte de la Conferencia Nacional, Minnesota Vikings le dio las gracias a Mike Zimmer tras haber cerrado con marca de 8-9 que lo dejaron dos puestos abajo del boleto a la siguiente fase.
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Statement from the #Vikings ownership group pic.twitter.com/QoCsknmhzB
— Minnesota Vikings (@Vikings) January 10, 2022
Estuvo ocho campañas en la institución: su mayor logro fue avanzar hasta la final de conferencia de 2017, donde se quedó con las ganas de acceder al Super Bowl LII siendo eliminado por Philadelphia Eagles, que levantó el trofeo Vince Lombardi.
Brian Flores, de Miami Dolphins, es otro de los despidos del Black Monday de la NFL.
Ni siquiera el reclutamiento de Tua Tagovailoa en 2020 fue suficiente para poder superar la etapa regular con su más reciente head coach, quien estuvo al mando desde 2019 sin poder disputar una sola postemporada.