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Mientras que la mayoría de los equipos de todo el mundo están cuidando su dinero ante la crisis económica provocada por la pandemia del coronavirus, hay otros que están dispuestos a invertir grandes cantidades por refuerzos, tal es el caso del Chelsea, que buscaría fichar a Timo Werner.

El delantero es una de las sensaciones en la Bundesliga con el RB Leipzig.

De acuerdo con el diario alemán Bild, el acuerdo ya estaría cerrado para que el delantero se integre a las filas de los ‘Blues’ a partir de la próxima temporada por 60 millones de euros: una cantidad enorme en una crisis sanitaria por la que está atravesando el planeta.

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Por si fuera poco, el periódico británico Daily Mail asegura que la escuadra dirigida por Frank Lampard también tendría apalabrado a Hakim Ziyech, del Ajax por 40 millones de euros, y tendría en la mira a Ben Chilwell, del Leciester City.

La suma supera los 100 millones de euros.

¿Por qué el Chelsea gastará tanto? La respuesta es sencilla: durante el año pasado, el club no pudo hacer ningún fichaje tras ser sancionado por la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA) por haber registrado a 29 jugadores menores de edad no nacidos en Inglaterra, algo que no está permitido por el organismo rector del balompié mundial.

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Debido a lo anterior, su Director Técnico tuvo que confiar con el talento que ya tenía, como Tammy Abraham, Mason Mount y Reece James, cuyo desempeño no ha sido suficiente para estar cerca del título de la Premier League y que tienen un pie fuera de la UEFA Champions League después de haber sido goleados 0-3 por Bayern Múnich en la ida de los Octavos de Final.

Ahora, pretenden que el siguiente año sea diferente.

Chelsea buscaría a Timo Werner junto a otros refuerzos después de un ciclo en el que su caja estuvo completamente cerrada por órdenes de la FIFA y buscará aprovechar todo el dinero que se ahorró para reforzarse de la mejor manera posible y volver al protagonismo del futbol inglés, como lo dicta su historia.