Barcelona perdió en la semifinal de ida de la Copa del Rey ante el Sevilla y volvió a probar el sabor amargo de la derrota tras 6 partidos consecutivos sin caer.
El duelo de vuelta se jugará hasta el próximo 3 de marzo.
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Lionel Messi y Dembélé hicieron buena mancuerna y lucharon juntos hasta el final del encuentro para encontrar el empate, sin embargo, el arquero rival, Yassine Bounou, les negó el gol.
En un partido al que le faltó brillo, pero no las oportunidades de goles, todo se definió en el primer tiempo, cuando Jules Koundé marcó el gol que le daría el triunfo al Sevilla.
El defensa francés se sumó al ataque, metió un caño a Umtiti y definió ante Ter Stegen, que poco pudo hacer ante el disparo.
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Durante los primeros 45 minutos, Lionel Messi tuvo un mano a mano con el arquero, pero este metió un manotazo y le negó el empate al argentino.
Para el segundo tiempo, Barcelona no dejó de luchar, pero no encontró el modo de romper con la barrera defensiva y el muro que significó Bono bajo los 3 palos.
Al 54′, el arquero del Sevilla sacó un remate de Messi y un minuto después estuvo atento para evitar un gol olímpico de Dembélé.
Tuvo que llegar Ivan Rakitic, aplicando la ‘ley del ex’, que quedó solo dentro del área, disparó y mando el esférico al fondo de la red, para ponerle cifras finales al marcador y acabar con la esperanza de un posible empate.
Con falta de suerte y una gran actuación del portero ‘sevillano’, Barcelona perdió en la ida de la semifinal de la Copa del Rey y tendrá que esperar hasta el 3 de marzo para pelear su pase a la final.