El rompecabezas que tiene Cowboys en frente cada vez es más complicado y es que a sólo unos días de que inicie la Agencia Libre, tiene que cerrar las negociaciones con Dak Prescott y su receptor, ya que de ellos dependen todos los movimientos que haga la franquicia para la siguiente temporada. El principal lío es con el mariscal de campo, ya que Amari Cooper quiere jugar en Dallas el resto de su carrera.
En 2018 el receptor empezó a formar parte de la franquicia de la Estrella Solitaria.
A pesar de los constantes cambios en las negociaciones, el equipo espera mantenerlos para las siguiente temporadas y no tener que hacer uso de la etiqueta de jugador franquicia de mala manera. Cooper llegó procedente de Oakland Raiders a la mitad de 2018 y en año y medio de pertenecer a la ‘Estrella Solitaria’ puede asegurar que ese es el lugar en el que se quiere retirar.
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Dallas necesita cerrar a Prescott primero.
«Amo ser un Dallas Cowboy, amo todo lo que está alrededor. Pienso en ello todos los días, tan solo el aura de ser uno más del equipo no puede superarse. Quiero ser un Cowboy de por vida«, expresó el receptor.
El plazo para poner la etiqueta de jugador franquicia es en marzo 18 y Cooper habló a principios de enero acerca de que nada lo iba a sorprender aunque desea una seguridad a largo plazo con un contrato. Esto es poco viable debido a las exigencias de Dak Prescott en lo que económico, ya que es lo que está deteniendo la negociación. Los deseos del mariscal de campo pueden ver afectada la situación de Cooper.
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Hay dudas sobre quién debe de tener la etiqueta de jugador franquicia.
Prescott también entrará a la Agencia Libre y espera poder llegar a un acuerdo con Dallas aunque exige un serio incremento de su salario y estar al nivel de los mejores de la liga. El QB desea quedarse en la franquicia, pero la situación con el tope salarial los pone en varios predicamentos.
El objetivo principal es cerrar a los dos y a partir de ese momento empezar a construir el equipo de Mike McCarthy. Cooper quiere que el equipo encuentre una manera de retenerlos a los dos. Quiere ser un Cowboy de por vida y ganar títulos. La dupla ha funcionado en el poco tiempo que llevan juntos.
Faltan pocos días para que inicien oficialmente las actividades de la NFL para la temporada 2020 y aún existen muchas incógnitas en el roster de Dallas. Jerry Jones tiene que tener en cuenta que el tope salarial es muy importante para ellos y definir el futuro de Prescott podría ayudar a que Amari firme un buen contrato y de ahí empezar con otras renovaciones y contratación de personal.
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Amari Cooper quiere jugar en Dallas el resto de su carrera.
Todavía no deciden quién usará la etiqueta de jugador franquicia. Cooper terminó el 2019 con 79 recepciones para 1,189 yardas y 8 anotaciones. Por otro lado, Prescott cumplió con 4,902 yardas aéreas, 30 anotaciones y 11 intercepciones. Quedaron fuera de playoffs.
Stephen Jones, Vicepresidente de la franquicia asegura que la decisión tendrá que estar lista la próxima semana y están en buen camino a cerrar a sus dos principales para la siguiente temporada.