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Cualquiera lesión es preocupante para un equipo, pero cuando le pasa al mariscal de campo, eso sí es algo de lo que deben preocuparse. Así estaban los Patriots cuando estaba en duda que Tom Brady estuviera bien, pero al final resulta que sí jugará contra los Cowboys.

Entró a la lista de cuestionables en la semana.

Es cierto que a sus 42 años, el ganador de 6 anillos de Super Bowl, luce mejor que nunca, pero eso no quiere decir que no cuerpo no comience a pasarle la factura. Es muy raro verlo lesionado, pero conforme pasa el tiempo, muchas cosas pueden cambiar.

Brady no se ha perdido un solo partido desde 2016, cuando tuvo una suspensión de 4 encuentros por el tema de los balones desinflados en un Super Bowl. Eso quiere decir que seguirá con la buena racha de titularidades y contra los Cowboys, conseguirá de número 55 de manera consecutiva.

 

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Su codo derecho parece estar bien para el duelo.

En la semana, todos los aficionados de los Patriots entraron en pánico cuando se dijo que su QB a lo mejor no jugaba por una molestia en el codo y hasta era cuestionable un día antes. Para su buena suerte, eso cambió el domingo cuando se aseguró que si estaría presente en los emparrillados.

 

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Do or do not. There is no try.

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Muchos creen que Brady podría estar teniendo la peor temporada de su historia, ya que la marca de 9-1 que tiene Nueva Inglaterra, no se la deben ni a él ni a su ofensiva. Ha lanzado para 2,752 yardas y 14 touchdowns en 10 partidos esta temporada. Está promediando solo 6.8 yardas por intento, su peor marca desde 2002.

Tiene 6 partidos más para demostrar lo contrario.

La temporada está en la recta final y Tom Brady no ha mostrado de lo que es capaz -a lo mejor es hora del retiro-, pero aún tiene oportunidad de hacerlo y el hecho de que sí jugará contra los Cowboys es una buena manera de empezar a hacerlo.