Foto: @Tampa Bay

El repentino retiro de Rob Gronkowski el año pasado tomó a más de uno por sorpresa, pero parece que ese descanso es justo lo que necesitaba por qué durante la pretemporada 2020 con los Tampa Bay Buccaneers ha demostrado un nivel en el que parece que el tiempo no ha pasado para el ala cerrada.

Las lesiones lo llevaron a decirle adiós a los emparrillados.

Antes de que empezará la temporada 100 de la NFL, el ala cerrada decidió ponerle, momentáneamente, un fin a su carrera. Dijo que debía de recuperarse y sanar, tanto física como mentalmente, sobre todo para poder encontrar otra vez el amor al futbol americano, ese que terminó de ser divertido para él.

Nadie sabía si en algún momento iba a regresar, pero el descanso funcionó. ‘Gronk’ le volvió a dar una oportunidad a este deporte junto con su mejor amigo Tom Brady y el año sabático que se tomó pudo haber regresado al ala cerrada dominante que era en sus primeros años en Nueva Inglaterra.

 

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El entrenador de Buccaneers lo ve mejor que nunca.

“Me parece que se ve como hace cinco o seis años”, dijo Bruce Arians “Ya no usa esa enorme protección en el codo. Se mueve y corre rápido otra vez y tiene un gran control de su cuerpo”. Este deporte volvió a ser divertido y ‘Gronk’ lo esta disfrutando.

El cambio de equipo también ha sido clave en ello. En Tampa Bay tiene en Arians a un coach con una personalidad radicalmente opuesta a la que tuvo con Belichick (tipo militar dirían muchos), regresó a jugar con su mejor amigo y quarterback, además de que cuenta con un equipo que fácilmente podría pelear por el Super Bowl.

 

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We miss you, Krewe ♥️

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El ‘Gronk’ de los últimos años es parte del pasado.

En sus tres últimas temporadas con los Patriots sólo jugó 35 de 48 partidos debido a las lesiones. Pero eso parece estar muy lejos de lo que esta por suceder por qué Rob Gronkowski es alguien nuevo en la pretemporada 2020 de los Tampa Bay Buccaneers y esa misma energía lo llevará a su mejor nivel en los partidos importantes.