Foto: Getty

El técnico español llegó a Cruz Azul con un gran cartel, mucho se esperaba de él, y si bien consiguió unos cuantos buenos resultados el rendimiento no fue el esperado. En lo personal las cosas tampoco fueron de lo mejor ya que Paco Jémez sufrió durante su estancia en México, así lo confesó en entrevista para The Coaches’ Voice.

En entrevista, el exentrenador celeste platicó de muchos temas de su actualidad y de su pasado, por lo que uno de los puntos más importantes fue su paso sobre México, mismo que describió:

«En México fue mucho peor. Había días que ni siquiera dormía. Se juntaba todo. Desde la presión de los resultados a la altitud de la ciudad. Tuve que ir al médico para que me ayudara a conciliar el sueño, pero solo conseguía dar unas cuantas cabezadas por la noche«.

Foto: Getty

El español aseguró que no había vivido una experiencia similar a la que tuvo en nuestro país, mismas que van más allá de lo que sucede dentro del terreno de juego:

«Llevó desde 2006 como entrenador, con diferentes etapas y situaciones. Pero te puedo decir que México me ha dejado marcado. Es un país muy duro. En todos los sentidos. Un sitio donde pasan cosas que en España solo ves por televisión«.

Otro punto a tratar fue la relación con los medios de comunicación en México, los cuales se han caracterizado por ser muy particulares:

«La prensa es mucho más incisiva y mucho más hiriente que España. Algunas entrevistas llegaron a niveles que nunca me habría esperado, pero sabía que si agachaba las orejas me comían. En los primeros momentos me calentaba mucho, pero lo hacía porque había preguntas que me parecían ofensivas. No solo para mí, también para el club y mis jugadores«.

Foto: Getty

Esta situación no afectó del todo a Jémez, quien aseguró que después de todo es algo que disfrutó en su momento:

«Al final hasta disfrutaba en las ruedas de prensa. De hecho, hay periodistas mexicanos que me han mandado mensajes cuando he firmado por el Rayo para decirme que echan de menos esos momentos«.

Actualmente el español dirige al Rayo Vallecano y a juzgar por sus palabras, su regreso al futbol mexicano se ve prácticamente imposible.