Chelsea está conformando un trabuco para volver al protagonismo la próxima temporada en la Premier League y UEFA Champions League, en lo que va del mercado de fichajes de verano 2020, ha incorporado a Timo Werner y Hakim Ziyech, pero va por más.
Entre ambos ha gastado 93 millones de euros.
Por un lado, el centro delantero proveniente del RB Leipzig costó 53 millones de euros, mientras que el traspaso del extremo derecho que llegó del Ajax fue por otros 40. El equipo se quedó en la cuarta posición de la liga de Inglaterra y, con lo justo, accedió a la siguiente edición de la competencia continental.
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Es por eso que Román Abramóvich, propietario de la institución, quiere proveer de las mejores armas a Frank Lampard para que esté aún más cerca del título en la justa doméstica y que haga un buen papel en el certamen por la corona europea.
Kai Havertz, Ben Chilwell, Thiago Silva y Malang Sarr son otros jugadores pretendidos por los ‘Blues’.
La suma del valor de todos ellos, según el portal especializado Transfer Markt, es de 141.8 millones de euros. Si cierra todas las contrataciones, la cifra total ascendería a 236.8 millones: la segunda más grande de su historia tras los 260.5 invertidos en la campaña 2017/18.
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La buena noticia es que ha recibido a cambio 74 millones de euros por las transferencias de Álvaro Morata al Atlético de Madrid, Mario Pasalic al Atalanta y Nathan al Atlético Mineiro de su natal Brasil.
Todavía podría obtener más recursos con futuras ventas.
El punto es que Chelsea está aprovechando el mercado de fichajes de verano 2020 para conformar un plantel que pueda pelear en la élite de futbol mundial, algo que no sucede desde 2012 con la obtención de su único título de UEFA Champions League. Su más reciente campeonato de Premier League fue en 2017.