Las cosas dentro del terreno no son las mejores para Luka Jovic y parece que fuera de él tampoco, ya que el delantero del Real Madrid pagó para no ir a la cárcel. La razón por la que casi acaba tras las rejas es que rompió el confinamiento mientras estaba en su país natal, Serbia.
Algunos jugadores pudieron regresar a cada hace unos meses.
Cuando la pandemia se desató, el mundo del futbol de detuvo en casi todo el mundo y mientras algunos jugadores pudieron resguardarse con sus familias, otros pidieron oportunidad para viajar a su país de origen. Uno de ellos fue Luka Jovic, quien recibió el permiso, pero no cumplió con las normas.
En el momento que aterrizó en Serbia, el jugador debía de quedarse 14 días encerrado antes de poder volver a salir, a cosas necesarias solamente. Era algo obligatorio que el gobierno serbio puso en marcha y cualquiera que no lo cumpliera, podría pisar la cárcel.
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Jovic no cumplió con esa regla y fue descubierto.
Se le vió por las calles de Belgrado celebrando el cumpleaños de su novia, Sofija Milojevic. La noticia se hizo tan viral que hasta el presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, le hizo saber de que si volvía a salir de su domicilio sería arrestado.
Cuando parecía que todo se había solucionado con un simple regaño, resulta que si recibirá un castigo. Se le notificó que debía de pagar 30 mil euros como multa, mismos que el delantero se había negado a pagar y por eso la fiscalía abrió un proceso judicial en su contra.
💥 Informa @melchorcope
👨🏻⚖️ Luka Jovic, jugador del @RealMadrid, ha pactado con la fiscalia Serbia pagar 30.000€ por saltarse el confinamiento el pasado mes de marzo
❌ Evita así la posibilidad de ir a la carcel pic.twitter.com/H28HFJtVNN
— El Partidazo de COPE (@partidazocope) November 10, 2020
La sentencia fue 6 meses de prisión.
Cuando se dio a conocer que existía la posibilidad de que estuviera tras las rejas, Jovic llegó a un acuerdo con las autoridades -mismo que se le había implementado antes- y Jovic pagó los 30 mil euros que le pedían, todo para no ir a la cárcel.