La era post-Andrew Luck acaba de empezar y llenar sus zapatos no será una tarea sencilla. Indianapolis no tiene mucho tiempo para tomar una decisión sobre su QB esta temporada, pero mientras lo hace, confiará en su suplente. Sin duda las incógnitas están relacionadas a si Jacoby Brissett puede vivir a la altura de Andrew Luck en los Colts.
El jugador es su única opción por el momento.
A menos de 2 semanas de que empiece la temporada 100 de la NFL, la franquicia no tiene mucho margen de movimiento. No hay nada bueno en la agencia libre y el Draft fue hace meses y elegir a un jugador novato es cavar su propia tumba, sobre todo para un equipo que es, o era, contendiente al Super Bowl.
Tendrán que jugársela con el QB de 26 años que llegó a la liga en 2016 con los New England Patriots y apenas hace 2 temporadas forma parte de los Colts. Muchos creen que no lo logrará, pero puede ser que sea como un Nick Foles con los Eagles, quienes ganaron un Super Bowl con él.
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Brissett es uno de los mejores quarterbacks suplentes de la NFL.
Puede presumir de cosas que pocos ‘backups’ logran, 17 inicios en sus 2 temporadas. Dos con los Patriots en su año de novato, uno tras la lesión de Garoppolo y otra por la sanción por ‘Deflategate’ de Tom Brady, los otros 15 fueron con los Colts cuando Luck se perdió la campaña 2017 por lesión. Así que la experiencia no será un problema para él.
Sus números no ha sido los mejores y de hecho bastante discretos, 13 touchdowns, 7 intercepciones, 152.5 yardas por partido y 59.1% de pases, con rating de 81.6. Sus estadísticas no son impresionantes, pero para un QB suplente no son las peores, tampoco.
Lo que le podría ayudar es su nuevo entrenador en jefe.
Frank Reich es una de las mentes ofensivas más brillantes de la liga. ¿Recuerdan cuando hablamos de Nick Foles? Bueno, él fue quien ayudó a las Águilas de Philadelphia a que un QB suplente conquistará un Super Tazón al vencer a los Patriotas de Nueva Inglaterra.
Esta temporada, Reich construirá una ofensa intentando aprovechar la movilidad de Brissett, misma que será muy fácil de llevar a cabo porque cuentan con la mejor linea ofensiva de la liga. El año pasado solo permitieron 18 capturas, la menor cantidad de la NFL.
Aún así las cosas no se ven del todo bien para el equipo.
Se podría repetir la historia de 2011, cuando Peyton Manning perdió toda la temporada por sus problemas de cuello, por lo que los Colts fueron el peor equipo de la liga con un récord de 2-14. Bueno, no es momento de ser tan exagerados con los de Indianapolis.
Tienen una buena ofensiva con T.Y. Hilton como receptor principal, así que si su nuevo QB logra llenar los zapatos de Luck puede ser que Jacoby Brissett es lo que necesitan los Colts o al menos, en lo que buscan a un nuevo mariscal de campo franquicia en el Draft del 2020.