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El domingo no fue un buen día para ser aficionado del Liverpool, ya que no solo empataron contra el Fulham y perdieron el liderato de la Premier, sino que también Diogo Jota se lesionó, uniéndose a la extensa lista de lastimados que tiene el equipo dirigido por Jürgen Klopp.

Es una de las grandes sorpresas del club.

Llegó en el mercado de verano directo del Wolverhampton por 40 millones de euros. Desde el principio creó una diferencia, convirtiéndose en titular junto con Sadio Mané y Mohamed Salah, con el buen trabajo que estaba haciendo, hasta le quitó su lugar a Firmino.

Ha jugado 17 partidos y marcado nueve goles en lo que va de la temporada. Es una baja significativa para el Liverpool, debido a que no se encuentran en su mejor momento y la prueba de ella fue el empate contra el Fulham, el cual solo consiguieron gracias a un penal en los últimos minutos del encuentro.

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El empate fue lo menos preocupante.

Una lesión en la rodilla de Diogo Jota, hará que sea baja de seis a ocho semanas. «Es una lesión peor de lo que pensamos en un primer momento, pero mejor de lo que pensamos después», confirmó Jürgen Klopp, quien confirmó que el delantero no necesitará pasar por el quirófano.

Lo que realmente estresa al equipo y a toda la afición es que esta lesión es solo una de las múltiples que han tenido. Los defensores Virgil van Dijk y Joe Gomez se lastimaron de gravedad, dejándolos fuera bastante tiempo y Thiago Alcántara, James Milner y Xherdan Shaqiri también se están recuperando de sus lesiones, un poco más leves.

Los ‘Reds’ son un auténtico hospital.

Eso está empezando a afectarlos ya que no solo se trata de que Diogo Jota se lesionó, sino que el futuro del Liverpool corre peligro, porque perdieron el liderato de la Premier con ese empate ante el Fulham y de seguir por ese camino, retomarlo parecería imposible.