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Hace unas semanas, el exjugador del América estaba teniendo un buen desempeño y poco a poco se ganaba su titularidad con el Betis, pero el COVID-19 llegó a su vida y tuvo que alejarse de las canchas por un tiempo, aunque la buena noticia es que no fue mucho, ya que Diego Lainez regresó a los entrenamientos.

Dio positivo el pasado 29 de enero.

En ese momento, el mexicano fue alejado de la plantilla y procedió a confinarse en su domicilio, como lo dictan los protocolos de la pandemia. Fueron 11 días los que no pudo estar con los ‘verdiblancos’, lo cual es poco tiempo a comparación de otros futbolistas que han estado hasta 3 semanas fuera.

Aunque Lainez ya dio negativo en las dos pruebas reglamentarias, el primer día no estaba entrenando a la par de sus compañeros y eso por dos razones: la primera es para asegurarse de que no existe un riesgo de contagio y la segunda, físicamente puede estar débil y debe de recuperar el ritmo.

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El día martes entrenó en solitario.

Fue hasta el miércoles donde pudo estar otra vez con el resto de la plantilla y aunque no es seguro que vaya a tener actividad de inmediato, el mediapunta ya se prepara para el partido del próximo domingo ante el Villarreal en el estadio de La Cerámica.

Ahora que Diego Lainez regresó con el Betis, buscará volver a la titularidad lo más pronto posible. Llevaba jugados en esta temporada un total de 722 minutos en quince partidos y tras la detección del COVID-19, se perdió los compromisos ligueros ante Osasuna y Barcelona y la eliminatoria copera de Cuartos de Final ante el Athletic de Bilbao.