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Tuvieron que pasar 50 años para que la ciudad de Kansas City volviera a ver un Trofeo Vince Lombardi recorrer sus calles. Solo necesitaban que llegara Patrick Mahomes y dos años después de que eso pasara, obtuvieron lo que tanto habían esperado y lo festejaron a lo grande con el desfile de campeones de los Chiefs.

Ni siquiera el clima pudo detenerlos.

Todo empezó la noche del martes, cuando los hoteles cerca de donde sería el festejo estaban llenos y algunas personas trajeron su propio alojamiento: casas de campaña. A medida que la temperatura rondaba los -20 grados, familias enteras se preparaban casi 4 horas antes para tener los mejores lugares. 

«Nos despertamos a las 6 en punto, recogimos todo nuestro equipo», dijo Peters, un fiel aficionado, quien fue con su esposa e hijos. «Tomó unos 30 minutos para cargar todo arriba, empaqué el calentador, conseguí una pequeña carpa y esperamos».

 

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Downtown on Sunday night was insane ?

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La última vez que los Chiefs ganaron un Super Bowl, ni él ni su familia habían nacido.

Los jugadores llegaron en camiones con dos pisos, Patrick Mahomes y Travis Kelce lideraron el desfile, pero ambos muy abrigados por el frío que estaba haciendo, aunque ni siquiera esa evitó que festejaran a la grande, con una cerveza en mano.

Andy Reid también estaba presente. Uno de los entrenadores en jefe con más historia por fin había conseguido su campeonato y no podría dejar de celebrarlo. En la parte de enfrente del camión levantaba el trofeo Vince Lombardi para enseñarle a la ciudad que por fin estaba de regreso en casa.

Patrick Mahomes fue la sensación.

Durante un momento del desfile el camión se detuvo y el QB se bajó para saludar a los aficionados que estaban en la calle muriendo de frío, pero emocionados de poder ver al jugador que los llevó hasta el campeonato. Aunque la mejor parte fue cuando estaba atrás sentado y alguien le aventó una cerveza, a lo que solo la atrapó y tomó como si no tuviera fin.

Al mismo tiempo, aprovechó para lanzarle algunos pases a sus pequeños seguidores. Travis Kelce también hizo de las suyas al subir un video con su QB donde presumen un cinturón de la WWE.

El desfile de campeones de los Chiefs terminó en un escenario donde todos los jugadores dijeron algunas palabras a los aficionados que estaban presentes en el centro de la ciudad. Al parecer festejarán como si no hubiera mañana, para recompensar esos 50 años que estuvieron sin hacerlo.