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Lionel Messi ha conseguido múltiples éxitos con el Barcelona, motivo por el que tiene la posibilidad de decidir su futuro al final de cada temporada, pero justo cuando habría decidido abandonar al equipo, la cláusula de su salida se lo impediría.

El conflicto se debe al retraso de la campaña causado por la pandemia del coronavirus.

Normalmente, todas las temporadas finalizan en las últimas fechas de mayo, por lo que el argentino tenía la posibilidad de despedirse antes del 1 de junio de cada año. En este caso atípico, la actividad se alargó hasta agosto.

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El último partido del conjunto catalán fue el 14 de agosto y fue una pesadilla: fue eliminado de la UEFA Champions League por goleada 2-8 ante Bayern Múnich en Cuartos de Final, de manera que se quedó sin la posibilidad de ganar algún título. Eso sería motivo suficiente por el que la ‘Pulga’ quiere irse.

El proceso de su salida podría volverse muy turbulento.

Estrictamente, el delantero perdió la oportunidad de desvincularse de la institución ‘Culé’ este año hace casi 2 meses, pero la realidad es que nadie contaba con una pandemia que retrasaría todos los calendarios deportivos en el mundo.

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Si pensamos de manera flexible, es evidente que Lionel Messi está en todo su derecho de hacer válida su cláusula de salida del Barcelona a tan solo 11 días de haber finalizado su participación en la campaña que recién llegó a su final.

En caso de no ser liberado, cualquier club interesado en él debería pagar 700 millones de euros.

Es un hecho que habrá un grave problema interno provocado por la decisión del futbolista, quien desearía aprovechar lo establecido en su contrato para salir; sin embargo, el ‘Barça’ también tiene razón en no dejarlo ir por la fecha acordada en el documento firmado por ambos.

En fin, la cláusula de salida de Lionel Messi del Barcelona está por ocasionar un caos que podría llegar hasta la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA) en busca de una resolución sobre el futuro del argentino.