Tuvieron que pasar más de 70 años para que el Atlas pudiera ser campeón de la Liga MX por segunda vez en la historia y, muy probablemente, eso no hubiera sido posible sin Grupo Orlegi.
La empresa adquirió al club en 2019.
Una de sus ramas es el deporte y entretenimiento al poseer a Santos y Tampico Madero en nuestro país: los ‘Guerreros’ suelen ser constantes contendientes al título de la Primera División de México y la ‘Jaiba Brava’ está por disputar la final de vuelta del Ascenso MX.
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Se consolidó como una compañía exitosa construyendo un proyecto destacable en el equipo de Torreón, Coahuila, que ha conquistado un par de trofeos desde que fue comprado por ella en 2013.
También llegó a la final del pasado torneo Grita México A21.
Cuando se presentó la oportunidad de hacerse de la escuadra ‘Rojinegra’, no dudó en hacerlo como un nuevo desafío para replicar los logros obtenidos con Santos.
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Desde entonces se comenzó a reestructurar a la institución que venía de estar peleando por no descender cada semestre: se implementó el mismo modelo de trabajo que con el conjunto de la Comarca Lagunera y el cambio ha sido radical.
Literalmente pasó de ser uno de los peores clubes a convertirse en el monarca.
Es así como Atlas debe estar agradecido con Grupo Orlegi por guiarlo para ser campeón de la Liga MX: de no haber sido adquirido por la empresa presidida por Alejandro Irarragorri, muy probablemente seguiría batallando para recuperar su reputación.