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Arizona Cardinals comenzaron a preparar la temporada 2023 sin su mejor hombre (DeAndre Hopkins) o al menos el que debía serlo tras los incidentes de los últimos 10 días donde el receptor abierto criticó a la gerencia general de la franquicia, por lo que después de analizarlo decidieron rescindir su millonario contrato y no seguir más con el.

A pesar de que en el Draft de la NFL, el gerente general de los Cardinals, Monti Ossenfort, declarara «DeAndre es un Cardinal y seguimos adelante». Pues la situación no fructificó y los comentarios del jugador cayeron muy mal, por lo que tomaron una decisión que cambió por completo los planes del equipo para la temporada 2023 y ahora deberán buscar la manera de suplir su ausencia o preparar a los jugadores para ocupar ese puesto.

Durante este tiempo que pasó, los Cardinals han comenzado a preparar la vida sin DeAndre Hopkins que tenía contrato hasta 2025, pero ahora tienen que encontrar a los elementos dentro del roster que puedan cumplir esa función y al parecer las primera prácticas y charlas están siendo positivas, por lo que al parecer si hay sensaciones buenas al respecto hasta el momento.

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DeAndre Hopkins está en la agencia libre.

De acuerdo al head coach Jonathan Gannon, hasta el 26 de mayo, operaban bajo la premisa de que Hopkins sería parte del equipo este año. Pero, «todos los factores que estaban en juego», condujeron a la decisión de Arizona de liberar a Hopkins, añadió Gannon.

«Simplemente sentimos que era lo mejor para el equipo jugar con los que tenemos», mencionó.

La ofensiva definitivamente cambiará, ya que ahora no girará en torno de Hopkins y deberá encontrar variantes interesantes en su roster e inclusive para contratar en la agencia libre o por un intercambio, pero eso se decidirá en las próximas semanas. Para comenzar, el esquema en el 2023 será nuevo y diferente en comparación a lo que jugaba Hopkins bajo el ex entrenador en jefe de los Cardinals, Kliff Kingsbury. No obstante, su impacto no siempre ocurrió

DeAndre Hopkins está disponible en el mercado. El receptor tres veces All-Pro será una de las piezas más buscadas y suenan equipos como los Patriots, Cowboys para hacerse de sus servicios, pero con las reservas de su comportamiento y no tendrá un contrato similar al de Cardinals. En los 9 partidos que disputó promedió nada menos de 79.7 yardas por encuentro (10° mejor marca de la campaña), con 7.1 recepciones por partido.

En 2023 el primero de los dos años de extensión de contrato que firmó en 2020 con los Cardinals. En la temporada 2023 le iba a costar a su equipo 30.7 millones en el tope salarial, mientras que en 2024 esa cifra bajaría a 26.2 millones y ahora ni una ni otra y con alguna ffranquicia preguntándose si valdrá la pena que esté en su ofensiva.