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Durante meses, uno de los mejores receptores de la liga ha visto como los problemas lo consumen, porque en lugar de ser admirado por su habilidad, es criticado por sus decisiones. Antonio Brown está a nada de ser cortado por los Raiders, lo cual podría ser el fin de su carrera en la NFL.

Esto se veía venir desde hace mucho tiempo atrás.

Cuando salió de los Steelers, el receptor hizo creer a todos que el problema estaba dentro del vestidor del equipo. Tanto así que hubo personas que dijeron que la franquicia perdió a su estrella por el tema interno que tuvo con su QB, Ben Roethlisberger.

El detalle es que el drama desapareció en los Acereros cuando le dijeron adiós, mientras que lo único que pasó con Brown fue que se llevó todo eso a los Raiders. Aún no juega un solo partido de temporada con ellos y ya hay más problemas de los que tuvo en su antiguo equipo.

 

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Aunque todo este declive de Antonio Brown empezó antes de llegar a los Raiders.

Las cosas parecían ir ‘viento en popa’ para los Steelers y Brown la temporada 2018, pero el último partido fue ese detonante que faltaba para que la cosa explotara. El receptor no jugó ese encuentro por una supuesta lesión, pero la realidad saló a la luz después cuando Tomlin le había prohibido jugar por su actitud.

Esa semana, Brown no se presentó a algunos entrenamientos, además de que se peleó con Ben Roethlisberger y el entrenador decidió sentarlo. Bueno, parece haber sido el peor error del mundo porque desató el verdadero monstruo que llevaba dentro.

Desde ese momento, se dedicó a tirarle a los Steelers.

Primero pidió su salida del equipo, mientras que en sus redes sociales sacaba a la luz ciertas cosas que, según él, estaban mal en el equipo. Criticó a ‘Big Ben’, a JuJu Smith-Schuster y no bajó a la franquicia como una de las peores de la liga, eso a pesar de haber estado 9 años de su vida ahí.

Después de miles de tuits, los Steelers lo mandaron a los Raiders, sin saber que solo se intensificaría la situación. Las cosas parecían ir bien al principio, pero antes de que empiece la temporada 100 de la NFL, fue cuando los problemas volvieron a salir a flote.

Primero fue el tema de los pies, los cuales se le quemaron con el frío y no pudo entrenar varias semanas. El segundo fue el tema del casco, en muchas ocasiones Antonio Brown amenazó con no jugar en caso de que la NFL le prohibiera usar su equipamiento antiguo, pero él tuvo que ceder al fin y al cabo. ¿Terminaron los problemas?

No, los problemas nunca acaban con Antonio Brown. El receptor decidió no presentarse a entrenar en muchas ocasiones, motivo por el cual Mike Mayock, Gerente General de Oakland tomara cartas en el asunto y le mandara una carta donde decía que lo habían multado.

Brown ‘perdió un tornillo’ después de eso.

Hizo de las suyas en redes sociales, otra vez, cuando subió la carta a su Instagram con un mensaje que decía «Cuando tu propio equipo te odia, ahora todos tendrán que pagar». Era obvio que Mayock vería eso y al día siguiente lo citó para decirle que seguramente sería suspendido por su actitud.

Los Raiders lo volvieron a multar y el receptor recurrió a redes sociales para pedirle al equipo que lo cortaran, cosa que no pasaron ni 5 horas y le cumplieron su deseo. Brown se convirtió en agente libre aún sin haber jugado un solo partido con los ‘malosos’.

¿Creían que ahí acababa todo? Ese mismo día en la tarde, se anunció que el jugador firmó con los New England Patriots por un año. Sí, los campeones de la NFL agregaron a Antonio Brown, uno de los mejores receptores, pero también a uno de los más problemáticos. ¿Hará lo mismo que con los Raiders o ahora si se dedicará a jugar?

 

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Las cosas parecen no salirle para nada bien al jugador, ya que solo un par de días después de que lo contrataran los Patriotas, salieron a la luz supuestas demandas de hace 1 año donde lo acusaban de abuso sexual. Una exentrenadora personal de Brown dijo que la acoso en 2 ocasiones y que una tercera la violó.

La NFL tomó cartas en el asunto y decidió investigarlo. Durante ese tiempo, el receptor pudo jugar un partido con Tom Brady, que fue la semana 2 contra los Dolphins, donde los Patriots arrasaron con ellos. Esperemos que lo disfrutara porque fue el único encuentro que tuvo en esos colores.

Solo 11 días después de firmarlo, los Patriotas lo cortaron.

Aún no se sabe si las acusaciones son ciertas, pero al parecer el equipo no quiso tener nada que ver con alguien tan problemático. Antonio Brown es agente libre, por el momento, y espera que algún equipo lo tome, pero mientras siga en investigación por la NFL, eso es muy poco probable que suceda.