Desde su llegada al Feirense de Portugal, el defensa mexicano ha luchado por tener los reflectores suficientes para ser considerado un elemento del ‘Tri’, pero no son suficientes. Hoy Antonio Briseño llegó a 50 partidos en Europa y parece ser que finalmente tiene la regularidad que tanto anhelaba.
El ‘Pollo’ fue campeón del mundo sub-17 en 2011 y todo parecía pintar muy bien para tener una carrera brillante, desafortunadamente poco a poco fue perdiendo nivel y protagonismo en la Liga MX, desfilando por múltiples equipos como Atlas, Tigres y Veracruz. En 2016 el ‘Pollo’ tuvo que jugar en el Ascenso MX, con los Bravos de Juárez.
En 2017 el C.D. Feirense anunció la llegada del defensa mexicano a su equipo, procedente de los ‘Tiburones’ de Veracruz y hoy el ‘Pollo’ celebró sus 50 partidos en tierras portuguesas.
Lamentablemente esta celebración fue en la derrota 4-0 ante el Belenenses, donde jugó los 90 minutos en partido correspondiente a la jornada 24 de la Primeira Liga.
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A pesar de la titularidad, las cosas no van bien en Portugal.
El equipo de Briseño no ha podido ganar en lo que va del 2019 y se encuentra en el último lugar de la tabla general con 14 puntos y una diferencia de -28 goles y a 6 unidades de distancia del lugar 17, el Chaves.
Muchos medios y aficionados piden la convocatoria de Briseño a la selección mayor.
Sin duda cuando se habla de un posible llamado es difícil de ignorar el hecho de que su equipo es la segunda peor defensa de la Primera División de Portugal, permitiendo 42 goles en 24 juegos.