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Las lesiones han sido un factor que ha dejado a vrios jugadores en la banca durante esta temporada, pero para buena suerte de los Cowboys, su receptor estrella Amari Cooper, sí jugará contra los Vikings en el Sunday Night Football de la semana 10 de la NFL.

Un tobillo y una rodilla no tenían como cuestionable.

Durante toda la semana, el jugador practicó con limitaciones debido a que se resintió de una lesión que sufrió la temporada pasada en la rodilla. El jueves ni siquiera estuvo en el entrenamiento y eso dio a entender que no formaría parte del equipo el domingo.

Luego de algunas revisiones y que los médicos lo dieran de alta, se confirmó que Cooper se encuentra bien tanto de su rodilla como de su tobillo para poder jugar con los Cowboys, quienes buscan continuar con el liderato de su división.

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Su talento será crucial este partido.

El domingo por la noche, los de la ‘estrella solitaria’ enfrentarán a una de las mejores defensivas por aire de la liga, no en vano los Vikings sólo han permitido 225.1 yardas aéreas por juego en el 2019. Números que la colocan como la segunda mejor defendiendo el pase.

Cooper es uno de los mejores en la posición de receptor y lo demostró cuando llegó a los Vaqueros la temporada pasada y se convirtió en el objetivo preferido de Dak Prescott semana tras semana.

Sigue siendo el mejor del equipo.

Cuenta con 701 yardas y 6 TD por aire, cosa que ningún otro receptor tiene esta campaña, es por eso que la noticia de que Amari Cooper jugará contra los Vikings es lo mejor que le pudo pasar a los Vaqueros. ¿Podrán sumar su sexta victoria de la temporada?