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Todos, absolutamente todos, siempre regresan al lugar donde fueron felices. Como futbolista es imposible no tomarle cariño a un club, ese que no solo te catapultó a la fama, sino que se convirtió en tu segundo hogar, tal como le pasó a Xavi Hernández, quien se convirtió en leyenda con el Barcelona y ahora quiere ser entrenador del equipo.

Actualmente es entrenador del Al-Sadd.

El español jugó con el club catalán de 1998 a 2015 y la lista de títulos que consiguió es eterna. En mayo de 2015 anunció su salida del Barcelona tras 17 temporadas en el equipo español, firmando por tres años con el Al-Sadd, mismo donde empezó su etapa como entrenador.

Apenas cumplirá un año que tomó las riendas del equipo de Catar, pero al parecer es tiempo suficiente para buscar un reto más grande. Uno que alguna vez el gran Johan Cruyff le encomendó: «Él me decía que vendrían a buscarme y me daba consejos. Si el fútbol es una religión, él fue su dios», comentó el español.

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Sus deseos de liderar al Barcelona son enormes, pero sería con sus condiciones.

Hace unos meses le ofrecieron el puesto, pero lo rechazó porque no le gustó la manera en la que estaban haciendo las cosas. Buscaban destituir a Ernesto Valverde aunque la forma fue la incorrecta y eso hizo que Xavi dijera que no, desde un principio busca que las cosas se hagan bien.

«Yo tengo claro que quiero volver al Barça, me hace mucha ilusión. Igual años atrás podía darme cierto respeto, pero ahora que ya me he visto entrenando creo que puedo aportar cosas a los jugadores. Les dejé claro que yo me veía en un proyecto que empezara de cero, y en el que la toma de decisiones fuera mía», comentó.

Ya tendría claro a quiénes le gustaría tener a su lado.

Puso nombres y apellidos a su proyecto como Carles Puyol y Jordi Cruyff: «Soy muy de equipo; no quiero decidir solo. Aquí, las decisiones las tomamos con el staff... es una estructura horizontal, de consenso. Aunque luego la última palabra me corresponda a mí».

También tiene en mente a posibles futuros fichajes. «Yo ficharía extremos, tipo Neymar -no sé si él encajaría por el tema social, pero futbolísticamente no tengo dudas-; el Barça ya tiene juego por dentro… pero le faltan extremos como tiene el Bayern. No necesita muchos nuevos: Jadon Sancho, Serge Gnabry…», aseguró. Sus ideas son bastante claras y ahora que Xavi quiere ser entrenador del Barcelona, podría llevarlas a cabo muy pronto.