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La semana 12 de la NFL fue una de las más complicada en lo que va de la temporada 2020. Partidos tuvieron que posponerse, equipos se quedaron sin estadio y hasta hubo franquicias que no tuvieron líder en su ofensiva, aunque lo bueno es que ese último problema ya se solucionó porqué los quarterbacks de los Denver Broncos regresan al equipo.

Todos fueron puestos en la lista de Reserva/COVID-19.

Las malas noticias esa semana empezaron con el brote de contagios en los Baltimore Ravens, ya que 23 jugadores salieron positivos y el partido contra los Steelers tuvo que posponerse en 3 ocasiones -aún no se juega-. Después, Drew Lock, Brett Rypien y Blake Bortles, QB de Broncos, no pudieron estar contra los Saints.

Ninguno dio positivo, pero fueron considerados de alto contagio por haber convivido con Jeff Driskel, quien sí tuvo COVID-19. El resultado se dio a conocer el jueves, así que no tuvieron tiempo suficiente para confirmar que no estaba contagiados, así que los Broncos se quedaron sin QB.

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Todos ya regresaron a entrenar.

Cinco días después de haber sido puestos en la lista de COVID-19, dieron negativo, permitiéndoles volver a las actividades del equipo de cara al siguiente partido en la temporada 2020. Aunque todos podrían sufrir un castigo, debido a que se dio a conocer que ninguno de los tres portó máscaras alrededor de Driskel en algún punto mientras estudiaban video juntos en un día libre.

Vic Fangio, entrenador en jefe de Denver, dijo el lunes que las medidas disciplinarias adicionales «siguen en la mesa» para LockRypien y Bortles si no llega ningún castigo por parte de la NFL. Lo más probable es que sea una multa, ya que esta temporada no pueden darse el lujo de suspender a alguien.

Todos lo mariscales pidieron una disculpa pública.

Ahora que los quarterbacks de Denver Broncos regresan al equipo, esto quedará como un mal episodio en una temporada que ha cambiado la NFL por completo y que seguro no serán la última franquicia en sufrir de algo similar.