Foto: Getty Images

Una de las razones por las que se pudo llevar a cabo la temporada 2020 fue por qué la liga estableció reglas antes de que regresara la acción, pero parece que algunos no lo han entendido. La NFL no piensa dejar pasar ese asunto por alto y por ello, multó a varios coaches que no usaron cubrebocas.

No solo los jugadores tienen reglas para la campaña.

No tener aficionados en los estadios y no intercambiar el jersey al final del partido son algunas de las medidas que la NFL estableció para proteger a todos los involucrados, pero tampoco dejó fuera a los entrenadores y los obligó al usó de mascarillas mientras estén en la banca.

Asistentes, entrenadores en jefe y cualquier otro miembro del staff de un equipo tiene la necesidad de mandar jugadas a lo largo de todo el partido, por lo cual a veces no usan el cubrebocas, aunque es algo a lo que tendrán que acostumbrarse si no quieren que la NFL los multe cada semana.

Te recomendamos: Raiders estuvo a la altura de la inauguración del Allegiant Stadium

Te puede interesar: Jugador clave de los San Francisco 49ers se perderá el resto de la temporada

Tres entrenadores recibieron una multa en la semana 2.

Según The Associated Press, Vic Fangio de Denver Broncos, Kyle Shanahan, de San Francisco 49ers y Pete Carroll de Seattle Seahawks fueron castigados con 100 mil dólares cada uno debido a que no cumplieron las normas de salubridad durante sus respectivos partidos.

Aunque ellos no fueron los únicos que sufrieron las consecuencias, sino todo el equipo por qué también los multaron con 250 mil dólares. Eso quiere decir que entre las 3 franquicias y los 2 entrenadores, fue un total de 1 millón 50 mil dólares lo que se pago por no usar cubrebocas.

Podrían suscitarse más multas en estos días.

Jon Gruden de Las Vegas Raiders y Sean Payton de New Orleans Saints se podrían unir a la lista de coaches que multó la NFL después de que no usaron cubrebocas debido a que en el Monday Night no cumplieron con la norma. Además, este es solo el principio de una medida de la liga, pero si sigue sucediendo, podría ser una consecuencia más fuerte como una suspensión.