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La situación en Estados Unidos respecto al movimiento ‘Black Live Matter’ llegó a un punto donde no hay regreso, pero esto nunca hubiera sido necesario si hace algunos años le hubieran hecho caso a una personas. Colin Kaepernick, exmariscal de campo de la NFL, inicio un movimiento en contra de la brutalidad policíaca, algo similar a lo que sucede hoy en día.

La diferencia es que el exjugador lo hizo de forma pacífica.

George Floyd falleció hace unos días a menos de un policía que le puso su rodilla en el cuello y aunque en muchas ocasiones aseguró que no podía respirar, no dejó de hacerlo. El hombre afroamericano cayó inconsciente y falleció en el hospital horas después.

Eso despertó fuertes protestas en el país y a nivel internacional, no solo por parte de la comunidad afroamericana, pero al mismo tiempo hizo que muchos recordaran una señal de lucha que sucedió por la misma razón hace algunos años, una en la que Colin Kaepernick era el principal exponente.

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El exjugador se hincaba durante el himno nacional.

En 2016, cuando era el líder de la ofensiva de los San Francisco 49ers, el QB comenzó a arrodillarse durante el himno nacional de los Estados Unidos en cada partido. Fue como protesta hacia el trato de la policía a las personas de color, algo que generó polémica, pero unión entre sus compañeros.

«No voy a levantarme y mostrar orgullo en una bandera, por un país que oprime a la gente negra y personas de color. Para mí, esto es más grande que football y sería egoísta de mi parte voltear hacia otro lado. Hay cuerpos en las calles y gente siendo pagada y que se sale con la suya», fue lo que dijo Kaepernick al ser criticado por sus actos.

Desde 2017 ya no forma parte de la NFL.

El movimiento de Kaepernick contra la brutalidad policíaca empezó arrodillándose y aunque le costó su trabajo en los emparrillados, no fue en vano. Hoy en día, esa seña ha sido adoptada por los protestantes que buscan lo mismo que él, justicia para la comunidad afroamericana y todas las vidas perdidas que no han visto un castigo a sus agresores.