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Hace tres años, Jimmy Garoppolo llegó a San Francisco 49ers con la complicada tarea de liderar una ofensiva que quería convertirse en ganadora y aunque por un tiempo eso parecía que estaba logrando, han sido más las decepciones que los éxitos, razón por la que la última lesión del mariscal de campo pudo significar su salida del equipo.

Se lastimó en el partido contra Seattle Seahawks.

Al principio se dijo que se trataba de un esguince del cual saldría en un par de semanas, pero resultó ser más grave. El entrenador, Kyle Shanahan, dijo que Garoppolo podría necesitar una cirugía en el mismo tobillo en el que anteriormente sufrió un esguince, y en caso de que sea necesaria la operación, su temporada 2020 llegaría a su fin.

No es la primera vez que una lesión lo aleja de los emparrillados con los 49ers. En 2018, una rotura del ligamento cruzado en la semana 3, terminó su temporada prematuramente. En lo que va de la campaña 2020, se ha perdido dos juegos completos y existe la posibilidad de que su suerte sea la misma para la recta final de la temporada regular. 

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Las mismas lesiones han hecho que sus números no sean los mejores.

En 2018, se convirtió en titular pero no pudo demostrar su talento por la rotura de ligamento cruzado. En tres partidos, terminó con 718 yardas, 5 pases de TD y 3 intercepciones. Ese es otro problema para el mariscal de campo, la cantidad de intercepciones que tiene por año.

Estos son sus números en 2019:

– 3,978 yardas

– 27 pases de TD.

– 13 intercepciones.

En 2020:

– 1,096 yardas.

– 7 pases de TD.

– 5 intercepciones.

No es un mal mariscal de campo, pero las lesiones han sido un problema desde que llegó al equipo y eso es algo a lo que la franquicia no puede darse el lujo de tener, pagarle un contrato a alguien que no es seguro que pueda terminar la temporada saludable.

A Garoppolo le quedan dos años de su contrato de cinco años y 27.5 millones de dólares anuales, con sueldos de 24.1 millones en 2021 y 24.2 millones en 2022. Dejar ir al mariscal esta temporada no sería algo doloroso, ya que pueden romper los lazos con un cargo máximo de solo 2.8 millones. 

La última lesión de Jimmy Garoppolo con los 49ers puso sobre la mesa la posibilidad de que el equipo se deshaga de sus servicios, no por falta de talento, sino por falta de constancia en mantenerse saludable, el dinero no sería un problema y podrían intercambiarlo a otro equipo por selecciones del Draft, así que no se quedarían con las manos vacías.