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Para buena noticia de todos los aficionados blaugrana, la novela del argentino con el cuadro culé parece ser parte del pasado y no por el hecho de que lograron que se quedara en el equipo, sino por qué no hay resentimientos del jugador, el cual sigue haciendo magia con los pies y la prueba de ellos fue el gol de Messi en el partido de Barcelona vs Girona.

Fue su segundo partido de pretemporada.

En el primer encuentro de práctica antes de su debut en la temporada 2020/21 de LaLiga, vencieron al Gimnástic por 3-1. Los goles fueron de Dembéle, Coutinho y Griezmann, pero Messi sí tuvo participación los primeros 45 minutos del partido.

La era Koeman empezó y tal como lo dijo el entrenador, Messi es pieza clave en el nuevo proyecto, así que volvió a ser titular en el segundo partido de pretemporada contra el Girona y esta vez sí pudo hacerse presente en el marcador con un golazo antes del medio tiempo.

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Koeman sigue experimentando con las alineaciones.

Apostó por un esquema de cuatro defensas con Sergi Roberto, Gerard Piqué, Araujo y Jordi Alba, dos mediocampistas de contención en De Jong y Sergio Busquets, Philippe Coutinho contra la banda derecha, Trincao contra la izquierda, Antoine Griezmann de punta y Messi de falso 9.

Eso ocasionó que el argentino no creara muchas situaciones al principio, pero después retrocedió y así participó en dos goles. En el primero, el argentino recibió por la derecha, se quitó a dos, puso un pase filtrado a Trincao, quien la soltó a la izquierda para que Coutinho abriera el marcador.

En el segundo gol, todo fue obre del crack argentino.

Messi tomó le balón por la izquierda, enganchó para afuera, pero al no encontrar el pase, decidió hacerla él mismo y sorprendió a todos con un disparo de derecha que pegó en el poste para después ingresar a la portería. El arquero no tuvo oportunidad alguna ante ese tanto.

Aunque eso no fue suficiente, en el segundo tiempo la magia del argentino seguía. Messi anotó su segundo gol en el Barcelona vs Girona, firmando su primer doblete bajo el mando de Koeman, algo que sin duda emociona a más de un aficionado culé.