Por primera vez, desde que regreso el futbol, el cuadro de Quique Setién se vio bien en el terreno, hicieron equipo, lograron goles y sobre todo, se vieron bien de cara al futuro. Mucho de eso tuvo que ver con los movimientos que hizo el técnico español, sobre todo con Griezmann, porque su desempeño en el Barcelona se vio cómo nunca antes.
El tridente culé fue lo que les dio la victoria.
Primero fue un gol de Luis Suárez, después uno de Griezmann y ambos fueron con asistencia de Lionel Messi. Esa fue la razón por la que llevaron al francés al Barcelona, para tener un ataque envidiable y aunque tardaron un poco, parece que por fin lo encontraron.
Griezmann llevaba 5 meses sin meter gol, aunque lo preocupante era su desempeño, porque se veía perdido en el terreno. Cada vez que jugaba, pasaba desapercibido por la banda y su aporte al equipo era casi nulo, pero todo cambio cuando Setién decidió hacer algunos cambios.
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Lo colocó más centrado, justo detrás de Luis Suárez.
¿Cómo se le ocurrió eso? Puede que haya sido ingenio del entrenador español o que se haya basado en la técnica de Deschamps, quien usa a ‘Grizzi’ de esa manera en la Selección de Francia y bueno, todos saben la magia que el jugador ha hecho con la playera de los galos.
Se va a cumplir un año de que llegó al Barcelona y en el partido contra el Villarreal, fue la primera vez que el francés es utilizado como segunda punta. Valverde lo tuvo como delantero centro -por la ausencia de Suárez- y después Setién lo mandó al extremo izquierdo y en ninguna de las dos se adaptó como se esperaba.
También se entendió perfecto con sus compañeros.
Antes se decía que ‘Grizzi’ se veía perdido en el terreno, pero en esta victoria fue lo contrario. Participó más que nunca y fue el jugador que Messi buscó en más ocasiones, la prueba que su gol, cuando venía por detrás del argentino, quien le asistió con un taco y él le pegó de primera para ponerla en el ángulo.
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No hay que cantar victoria todavía porque aunque el desempeño de Griezmann en el Barcelona mejoró, faltan aún más pruebas para definir si realmente puede ser ese factor que necesita el club. En caso de lograrlo, entonces Setién encontró el lugar perfecto para el francés.