Foto: Nación Deportes

Ese mariscal de campo que ilusionó tanto en el 2016 y 2017, está en el olvido. Carson Wentz pasó a ser la estrella de los Philadelphia Eagles a un simple quarterback promedio, uno que le dará victorias a su equipo, pero nunca podrá llevarlos hasta lo más alto.

Wentz engañó a toda la liga.

Fue la selección 2 del Draft del 2016 y todos creían que la rompería en la NFL y vaya que lo hizo al principio, pero las cosas han cambiado mucho desde ese momento. No es culpa de su talento, todo tiene que ver con las lesiones que lo han perseguido por 3 temporadas consecutivas.

Después de lastimarte, una personas nunca vuelve a ser la misma. De ahora en adelante, intentan evitar el golpe a como de lugar y eso muchas veces significa no hacer bien tu trabajo por miedo a que vuelva a suceder lo mismo de hace unos meses.

 

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¡Oye, tranquilo, viejo!? Esto pasa cuando tu equipo pasó de ser contendiente al Super Bowl a empezar la temporada 1-2. #NaciónNFL ? | #NFL100

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Tuvo su oportunidad y una lesión se la arrebató.

Justo cuando estaba a punto de demostrarle a todos de lo que estaba hecho, una rotura del ligamento cruzado de la rodilla lo sentó durante la temporada 2017. Nick Foles tomó su lugar y fue el encargado de llevarlos al Super Bowl para ganarlo ante los New England Patriots. ¡Todas las miradas estaban en el suplente!

El año siguiente pudo haber intentado de nuevo, pero tuvo un inicio de 5-6 y una lesión en la espalda que lo volvió a mandar a la banca. Para complicar aún más las cosas, estuvo el regreso del Jugador Más Valioso del Super Bowl de la temporada pasada, Nick Foles, quien pareció recuperar la ofensiva casi de inmediato. 

¿Qué pasó con ese equipo que Wentz lideraba tan bien?

Parece ser que todos los problemas vienen desde el vestidor. Mientras que el sentimiento en el vestuario de los Eagles es que Foles era «universalmente amado», Wentz no. Muchos de sus compañeros lo definen como como «egoísta», «intransigente», uno que juega a «favoritos» y no le gusta ser «cuestionado». 

No es un jugador de equipo y quiere que las cosas se hagan a su manera, algo que nunca funcionará en un equipo de la NFL. «Lo han idolatrado toda su vida, y a veces actúa como si hubiera ganado 10 Super Bowls, cuando todavía no ha jugado, y mucho menos ganado, un juego de playoff», dijo una fuente anónima.

Podrá tener mucho talento en el terreno de juego, pero las Águilas no han podido ganar.

Los jugadores ofensivos se sentían principalmente más cómodos y seguros con Foles, no es una gran revelación, porque sabían que involucraría a todos en la ofensiva. Sus compañeros no se ven animados si saben que Wentz no los tomará en cuenta cada jugada. 

Esos son los motivos que no hacen a Carson Wentz un quarterback élite y los Philadelphia Eagles, quienes ya dejaron ir a Foles, tendrán que ver si buscan a otro talento o siguen ‘confiando ciegamente’ en su actual mariscal.