El Mundial de Clubes comenzó con emociones de todo tipo. El PSG demostró por qué es uno de los favoritos al título tras golear al Atlético de Madrid en un duelo donde dominaron de principio a fin. Con un plantel lleno de figuras, los parisinos dejaron claro que van por todo.

En contraste, el debut del Inter Miami fue decepcionante. A pesar de contar con nombres como Messi y Suárez, empataron en un partido sin grandes emociones. Otro equipo que sorprendió fue el Botafogo, que arrolló al Seattle Sounders, mientras que el Palmeiras empató en un cerrado duelo contra el Porto de Martín Anselmi.

La primera jornada dejó claro que no hay espacio para confiarse. La competencia está más pareja que nunca y cualquier error puede dejar fuera a un gigante.